Hace mucho que lo sé. Como lo supo mi padre, mi abuelo, mi bisabuelo, mi tatarabuelo. Todos y cada uno de mis antepasados masculinos, y también la genial Enriqueta, la dama del castillo en el siglo XVIII, y la cortesana Lorena de Hita, que conoció a Goya en la Corte, que tal vez fue algo…